viernes, 31 de agosto de 2007

Somos forros pero nos amamos!

Bienvenidos y malvenidos a la vez.

Nosotros somos los 7 FORROS. Somos un grupo de amigos que nació por el año 2000 durante nuestra estadía conjunta en la facultad. Bajo la premisa del "Que no se corte loco" seguimos siendo amigos (o pseudoamigos, o conocidos, o algo, o los chicos de la facu).

La cosa es que nos re queremos, pero muchas veces no nos bancamos. Nos forreamos sin querer todo el tiempo. Siempre nos fallamos, nos decepcionamos, nos peleamos, nos odiamos, nos todo. Pero al final terminamos queriendonos porque somos unos locos lindos re copados.

Somos tan forros que nunca nos llamamos "Amigos", si alguien pregunta somos "Los chicos de la facu", eso es de forro, porque despues vivimos reclamando cosas de amigos cuando nunca nos reconocemos como tales.

Estos somos los forros.


FORRO #1 – Cusuela

Cusuela se llama Fernando y es un forro. Te manda un mensaje a las 7 de la mañana para que vayas a la casa y despues cancela el plan. El muy forro siempre tiene un cumpleaños de algún pariente o amigo y nos deja de garpe al resto. Se enferma con frecuencia, es cojo de una gamba y se cree un rockstar porque toca la guitarrita. Este forro se hace el duro pero come ensaladas y usa cremas.

FORRA #2 - La Pocha
La Pocha se llama Eugenia y es una forra. Viene de un pueblo llamado Gualeguaychu y casi todos los fines de semana se va para allá y nos deja plantados. Esta forra toma mate amargo y nunca hay papel higienico en su casa. Se va al carajo con su tacañería, compra cosas porque son baratas aunque no las necesite. Tiene cabeza chica pero un día se hizo pelo suelto y en un época cantaba, aunque a la forra esta le daba vergüenza que la escucharamos.

FORRO #3 – Nacho
Nacho se llama Ignacio y es un forro. Parece un señorito inglés pero cuando abre la boca se nota que nació en una cloaca. El muy forro llora cuando alguien no hace lo que el quiere pero cuando otro organiza algo no va. Es el único que está casado y el muy forro ligó una casa de sus suegros. No se le puede dar ni un vaso de vino porque ya empieza a decir pelotudeces y a quedarse dormido parado.

FORRA #4 – Mecha
Mecha se llama Mercedes y es una forra. Se quiere hacer la mina cool-ochentosa y de humor inteligente pero en verdad es una negra villera de Erli. La muy forra compra tumbarranchos para navidad en lo de Elsa (que le vende falopa adentro de un pote de Mendicrin) y usa pijamas con bolsillito en el brazo como remera. Un día se compro el escalador de Jack Lalane, se mató haciendo dieta y dejo de ser Luis Salinas... porque antes era igual.

FORRO #5 – George
George se llama Jorge y es un forro. Se cree que vive adentro de una radio, se la pasa como un pelotudo haciendo compilados o buscando temas pedorros. Este forro se cree que la vida es un videojuego o una cancha de papi... pero de ponerla como Dios manda ni hablar. Ni con un rastrillo se le pueden acomodar esos pelos chuzos que le hacen cabeza de Astroboy. Este forro vive renegando como un viejo choto y baila como un pelotudo mientras se toma un Fernet, que es una bebida de pijotero amargo.

FORRA #6 – Vicky
Vicky se llama Victoria y es una forra. Es negra de piel y muchas veces de alma. Se hace la concheta pero no puede esconder su tilinguez de villa. Tiene un problema en la espalda que hace que la confundamos con Chewbaca cuando la vemos caminar. Siempre está a la espera de que alguien la pase a buscar, la lleve, la traiga, la arrime, lo que sea para no viajar sola. La muy forra se piensa que sabe cocinar porque mete un pan en una tostadora, en realidad no se lava ni sus propias bombachas.

FORRO #7 – Boto
Boto se llama Nicolas y es un forro. Estamos juntado plata para pagarle la estadia en una granja de rehabilitación. El sorete este es un borracho historico. Cuando está lúcido se cree que toca bien la guitarra pero la posta es que no toca bien ni el timbre. El muy forro llega tarde a todos lados, cual parásito se cuelga de otros para llegar a destino. Hace mil años que no se compra un par de zapatillas, es medio sucio y para colmo tiene aspecto de bañarse poco, aunque es todo un look super cuidado porque el muy maricón tarda horas en peinarse y arreglarse para salir.